- Inés Ibáñez, farmacéutica&nutricionista
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- Probióticos, Embarazo, suplementos, omega3, acido folico, hierro, yodo

Inés Ibáñez Algueró, farmacéutica y nutricionista
¿Son realmente los suplementos de embarazo necesarios?
Es muy frecuente la recomendación de suplementos nutricionales en las mujeres embarazadas tanto antes como durante la concepción de una forma totalmente despersonalizada, la razón mayoritaria suele ser que se presupone que va a existir un déficit en algún nutriente. ¿Podríamos evitar los suplementos si siguiéramos una dieta equilibrada? La respuesta es sí, pero la pregunta a continuación sería: ¿Realmente estás segura de que la sigues?
El embarazo es una etapa en la que debemos prestar todavía más atención a la alimentación. Por un lado, porque los requerimientos van a ser diferentes a los habituales, hablo de ello en un antiguo post sobre alimentación en el embarazo y por el otro, porque cualquier déficit podría tener efectos irreversibles sobre el feto. Es probable que si nuestra alimentación no es la adecuada lo podamos percibir no solo en el peso sino también en el estado de nuestra piel, mucosas, cabello, uñas o en forma de un cansancio inexplicable, en cambio, si esto sucede en el momento de embarazo y en meses claves en el desarrollo del bebe las alteraciones pueden ser mucho más graves.
La realidad es que la mayoría de nutrientes que vamos a encontrar en los complementos alimenticios enfocados al embarazo los podemos encontrar en la alimentación y sería realmente interesante que coincidiera esta etapa con la de visitar por primera vez a un dietista-nutricionista para poner tu dieta a examen. Seguro que te darías cuenta de que te estás olvidando de algún nutriente o no lo estás consumiendo en las cantidades necesarias.
En conclusión, los suplementos alimenticios podrían no ser necesarios si revisas a conciencia tus hábitos con la ayuda de un dietista-nutricionista, que tu ganancia de peso es la adecuada para el mes de embarazo en el que estás y tus analíticas salen dentro de los parámetros normales. En la salud se enfatiza mucho en que todos los cuerpos son diferentes y que todo debe ser personalizado, pero a la vez existe un sistema de salud desbordado que complica que esto ocurra y paralelamente unas dietas muy carenciales y restrictivas, problemas de absorción y además, posibles déficits que ya venían de antes del embarazo. Así que a través de los suplementos se busca -aunque quizás sí de una forma desinvidualizada- aquello que puede ser beneficioso para la mayoría de embarazadas.
¿CÓMO ELEGIR UN SUPLEMENTO PARA EL EMBARAZO?
Los suplementos de embarazo van a estar constituidos por un mix entre aquellos nutrientes deficitarios entre la población general y aquellos que van a resultar críticos para el desarrollo del feto. Llevarán un poquito de todo así que van a cubrir los requerimientos diarios en la mujer embarazada.
Podemos encontrar también los micronutrientes por separado, de está forma en aquellos déficits de nutrientes más concretos será mucho más específico y también se podrán aportar mayores cantidades.
Los nutrientes más importantes van a ser los siguientes:
EL ÁCIDO FÓLICO
El ácido fólico es una vitamina del grupo B también conocida como B9 que participa en la división celular y en la formación del tubo neural. El tubo neural es la parte del sistema nervioso que va a formar la médula espinal o el encéfalo, un déficit en el embarazo o antes de la concepción podría ocasionar espina bífida o hasta la muerte del bebe o una incapacidad de por vida.
Es muy importante la suplementación de ácido fólico desde el momento que se planifica un embarazo o al menos un mes antes de la concepción. Los niveles van a ser de 400 microgramos diarios hasta 5 miligramos en pacientes con riesgo (hijos anteriores con espina bífida, tratamientos que disminuyan los niveles de ácido fólico o madres diabéticas). En realidad, solo se ha demostrado ser efectiva su suplementación antes y durante los primeros 28 días de embarazo ya que es cuando se produce el cierre del tubo neural.
Además de la suplementación no podemos olvidar tomar alimentos ricos en ácido fólico que principalmente van a ser vegetales y legumbres. Aquellos alimentos con una mayor concentración de ácido fólico van a ser la soja, las espinacas, las acelgas, las judías blancas, las pintas y los garbanzos.
EL HIERRO
El hierro ayuda al transporte de oxígeno por la sangre. Cuando el cuerpo no tiene suficiente cantidad de hierro se le denomina anemia ferropénica.
Se calcula que un 40% de las embarazadas tienen anemia ferropénica, en ellas está ampliamente recomendado suplementar ya que va a evitar la prematuridad, el aborto espontáneo e incluso la anemia después del parto donde van a haber pérdidas de sangre importantes. Hay que hacer hincapié que aunque no estaría recomendado suplementar con hierro a todas las mujeres indiscriminadamente, existe una diferencia entre aquellos suplementos enfocados al embarazo que contienen hierro pero en cantidades recomendadas diarias para la mujer embarazada y aquellos enfocados a cuando existe una patología como es la anemia ferropénica que van a ser en cantidades muy superiores.
El hierro junto con la hemoglobina y la ferritina van a ser los marcadores más observados para determinar anemia ferropénica. Tengas o no déficit es muy importante que cuides de que tu alimentación sea rica en hierro y sobre todo si sigues una dieta vegetariana o vegana ya que los alimentos de origen vegetal a pesar de también contener hierro, va a ser de peor absorción y tendremos que echar mano de truquitos para mejorarlo como por ejemplo, la vitamina C presente en cítricos.
EL YODO
El yodo participa en la formación de hormonas tiroideas y la corteza neuronal. Un déficit de yodo puede disminuir hasta el 15% el cociente intelectual.
La guía de práctica clínica de atención en el embarazo y puerperio del ministerio de sanidad de España sugiere suplementar únicamente en aquellas mujeres que no alcanzan las cantidades recomendadas de yodo (3 raciones de leche y derivados lácteos + 2 g de sal yodada). Por tanto, es muy importante revisar que la sal que tenemos en casa es yodada.
EL CALCIO Y LA VITAMINA D
El calcio forma un 99% del esqueleto y la vitamina D va a ayudar al mantenimiento de los niveles de calcio.
El déficit de vitamina D durante el embarazo puede provocar un parto prematuro y un bajo peso al nacer. En España nuestros hábitos de vida tienden a ser pasar menos tiempo al aire libre o estar más protegidos del sol y han contribuido a un aumento del déficit de esta vitamina. Es por eso que es una de las vitaminas que más se van a revisar mediante analíticas en el embarazo y sobre todo en aquellas situaciones que por hábitos de vida o geográficamente la radiación solar sea menor.
Por otro lado el calcio, a pesar de ser un mineral muy importante no existe tanto déficit, significa que debemos continuar prestando atención a la alimentación (mayoritariamente lácteos) pero que no será tan necesaria su suplementación.
LA VITAMINA B12
Es un vitamina que ha generado mucho debate ya que al principio se pensaba que podía obtenerse de alimentos de origen vegetal pero que finalmente se concluyó que a pesar de que hay alimentos como por ejemplo, la espirulina o la alga nori que la contienen no es del tipo que es asimilable por los humanos y que por tanto nos va a ser útil.
Ahora que la tendencia es reducir aquellos alimentos de origen vegetal o ser flexiteriano, algo que personalmente defiendo, es cuando es más importante revisar las cantidades de alimentos de origen animal consumimos semanalmente, ya que es muy posible que sea necesaria la suplementación.
LOS ÁCIDOS GRASOS OMEGA-3
Los ácidos grasos omega 3 previenen la preeclampsia (subida muy peligrosa de la tensión arterial) y favorecen el desarrollo del cerebro en el feto.
Se encuentran mayoritariamente en los pescados azules como las sardinas, el salmón, el atún y el bonito los cuales se recomienda consumir de 1 a 2 veces por semana y del menor tamaño posible para almacenar la menor cantidad de metales pesados posibles pero también los podemos encontrar en alimentos fortificados en este nutriente como huevos y leche y en alimentos de origen vegetal como el lino y las nueces.
Existe mucha controversia sobre si es necesario suplementar este ácido graso. Es muy necesario obviamente, no lo puede fabricar nuestro organismo sino que procede 100% de la dieta, existe mucho déficit entre la población pero es perfectamente asequible con unos buenos hábitos.
PROBIÓTICOS
Los probióticos son aquellas bacterias beneficiosas que no solo colonizan el intestino sino que también la zona íntima.
Hay algunos autores que dicen que determinados lactobacillus podrían colonizar el endometrio y podría estar asociada una microbiota alterada con el fracaso de la implantación o el aborto espontáneo temprano es por eso que determinados suplementos enfocados al embarazo ya los contienen.
Los probióticos a pesar de que los podemos encontrar en productos fermentados como por ejemplo, los yogures, hay determinados estilos de vida que consiguen erradicarlos, desde el estrés hasta dietas muy bajas en fibras y muy ricas en ultraprocesados. Además, las concentraciones que encontraremos en los suplementos van a ser mucho mayores. Fertybiotic embarazo es de los pocos que ha apostado por introducirlo tras varios estudios clínicos que demuestran su eficacia.
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